Patagonia Sur

Pasa -a veces- que el sólo hecho de estar te hace, estar bien.
En ese lugar el momento da igual para el tiempo, y la pasta casera de alguien del NEA te recuerda que la Patagonia Sur tiene la magia de los que quieren estar.

El lujo no es vulgaridad, la materialidad lo es. 

Los que tienen el privilegio de tolerar el viento disfrutan los manjares de colores que dan las rocas, el lujoso cielo rosado perdió hace rato el reloj y se pasea fuera del horario de protección al menor.
Llevo 9 días y más de 2000km en Santa Cruz, y aunque vine a pasar antes de donde iba, no me estoy queriendo ir...