¿Para qué estás en este mundo?

"- Don, admito que esta vida puede ser interesante, o tediosa, o lo que tu quieras que sea. Pero ni aiquiera en mis momentos de mayor lucidez e podido entender por qué estamos aquí, para empezar. Háblame un poco de eso.

- ¿Tienes un poco de dinero, no ?
- Mucho, ¿por qué ?
- Vamos a ver la película - dijo -. ¿Invitas ?
- No se, Don. Entra tú. Yo volveré a los aviones. No me gusta dejarlos demasiado tiempo solos.
¿Qué era lo que hacía que una película fuera súbitamente tan importante?
- A los aviones no les sucederá nada. Vamos al cine.

Ya estaba comprando su entrada. Lo seguí al interior de la sala y nos sentamos en una de las últimas filas. 
Al cabo de un rato olvidé por qué habíamos entrado y me dejé atrapar por la trama, que de todos modos siempre me a parecido propia de un clásico del cine. Debía ser la tercera vez que la veía. 
Cerca del final, Don me tocó el hombro. Me incliné hacia él, mirando la pantalla, deseando que dejara para más tarde lo que me quería decir.

- ¿Richard ?
- Sí.
- ¿Por qué estás aquí ?
- Es una buena película, Don. Shh.
Los protagonistas dialogaban.
- ¿Por qué es buena ? - preguntó.
- Es entretenida. Shh. Te lo explicaré luego.
- Rompe el trance. Despierta. Son todas ilusiones.
Me irritó.
- Donald, faltan pocos minutos y después podremos hablar tanto como quieras. Pero déjame ver la película. ¿De acuerdo ?
Susurró apasionada, dramáticamente :
- Richard, ¿por qué estás aquí ?
- ¡Escucha, estoy aquí porque tú me pediste que entrara !
Me volví y traté de ver el final.
- Nadie te obligó a entrar, podías haber dicho no , gracias.
- ME GUSTA LA PELÍCULA...- Un hombre sentado en la fila de adelante se volvió para mirarme brevemente -. Me gusta, Don. ¿Hay algo malo en eso ?
- Absolutamente nada - respondió.

- ¿Lo haces todo por alguna razón ? - le pregunte.
- A veces.
- ¿Por qué la película ? ¿ Por qué quisiste ver súbitamente ésa ?
- ¿Hiciste una pregunta ?
- Sí. ¿Tienes una respuesta ?
- Esta es mi respuesta. Entramos en el cine porque hiciste una pregunta.La película fue la contestación.
Se estaba burlando de mí.
- ¿Cuál fue mi pregunta ?
Hubo un largo y penosos silencio.
- Preguntabas, Richard, por qué ni siquiera en tus momentos más brillantes has logrado descifrar por qué estamos aquí.



Lo recordé.
- Y la película fue la respuesta.
- Si.
- Ah.
- No lo entiendes - dijo.
- No.



- Era una buena película - explicó - . Pero la mejor película del mundo sigue siendo una ilusión, ¿no? Las películas ni siquiera se mueven: sólo parecen hacerlo. La luz cambiante parece moverse sobre una pantalla plana montada en la oscuridad.

- Bien, sí - empezaba a entender.
- Las otras personas, todas las que se encuentran en cualquier lugar donde vas a ver una película, ¿por qué están allí, cuando sólo se trata de ilusiones ?
- Bueno, para entretenerse - dije.
- La diversión. Eso es. Primera razón.
- Podría ser para educarse.
- Sí. Siempre lo es. Aprendizaje. Segunda razón.
- Fantasía, evasión.
- Eso también es diversión. La primera.
- Razones técnicas. Para ver como está filmada la película.
- Aprendizaje, la segunda.
- Para matar el aburrimiento.
- Evasión. Ya lo has dicho.
- Por un motivo social. Para estar con amigos - dije.
- Razón para ir al cine, pero no para ver la película. De todos modos, es una diversión. Primera razón.
Le bastaban dos dedos para enumerar todas las alternativas que se me ocurrían. La gente va a ver películas para divertirse, o para aprender, o para ambas cosas a la vez.

- Y una película es como una vida, Don. ¿Eso es ?
- Sí.
- ¿Entonces por qué iba a escoger nadie una mala vida, una película de horror ?
- La gente no va a ver las películas de horror sólo para divertirse. Al entrar al cine ya saben que es una película de horror - manifestó.
- Pero ¿por qué ?
- ¿Te gustan las películas de horror ?
- No.
- ¿Has visto alguna ?
- No.
- ¿Pero algunas personas invierten mucho tiempo y dinero en ver monstruosidades, o problemas melodramáticos que otros individuos juzgan necios y aburridos... ? - dejó flotando la pregunta para que yo la contestara.
- Sí.
- Tú no estás obligado a ver las películas que les gustan a esas personas, ni ellas a ver las que te gustan a tí. Eso es lo que llamamos "libertad".
- ¿Pero por qué alguien podría tener interés en horrorizarse, o en aburrirse ?
- Se trata de personas que piensan que se lo han ganado porque ellas, a su vez, horrorizan a los demás, o porque lees gusta la emoción del pánico, o porque suponen que las películas tienen que ser aburridas. ¿Puedes creer que muchas personas disfrutan, por razones que ellas juzgan muy sensatas, al imaginar que están indefensas en sus propias películas ? No, no puedes creerlo.
- No, no puedo - respondí.
- Mientas no entiendas eso, te preguntarás por qué algunos individuos son desdichados. Son desdichados porque han elegido serlo, ¡y eso está muy bien, Richard !
- Hum.
- Somos criaturas proclives a jugar, a divertirnos, somos las nutrias del Universo. No podemos morir, no podemos herirnos, así como no es posible herir las ilusiones proyectadas sobre la pantalla. Pero podemos creer que estamos heridos, y creerlo con todos los detalles torturantes que nos plazcan. Podemos convencernos de que somos víctimas, muertos y ejecutores amortajados por la buena y la mala suerte"


Cita del libro "Ilusiones" de Richard Bach