"Esta ciudad tiene cada vez más cemento, y menos aire", pensé, y automáticamente me acordé de ese Poema de Alfonsina Storni:
"Casas enfiladas, casas enfiladas,
casas enfiladas.
Cuadrados, cuadrados, cuadrados.
Casas enfiladas.
Las gentes ya tienen el alma cuadrada,
ideas en fila
y ángulo en la espalda.
Yo misma he vertido ayer una lágrima,
¡Dios mío, cuadrada!"
Que lejos que estamos de copiar lo que nos hace bien...